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Una joya del cine mudo con Harold Lloyd en su mejor momento. la historia por absurda no es menos comica, sino que con la presencia de Colosso y las acrobacias geniales de Harold hace de esta pelicula una recreacion muy satisfactoria.
A medida que las cosas se calientan para Lloyd y Ralston, el hilarante gigante Colosso (el personaje de Aasen) se une a la locura, y eso da lugar a algunos gags aún más humorísticos. La larga secuencia resultante del primer encuentro entre Harold y Colosso está muy bien hecha, exprimiendo más de lo que uno hubiera imaginado posible de una simple situación. Después, el tamaño y la fuerza de Colosso se utilizan de muchas maneras imaginativas, con un montón de gags visuales bastante elaborados que se preparan muy bien.
El conjunto funciona muy bien. Una vez que todo está preparado, pasa tan rápido que parece que sólo ha durado una fracción de su duración.
Gracias, Saludos cordiales